Un ejercicio de escepticismo: criticar la Numerología

Aviso que lo que viene es largo y aburrido.

Una vez me puse a elaborar una crítica completa de la Numerología,

debido sobretodo a que es una pseudociencia muy fácil de criticar,

hace agua por todos lados, es una ridiculez muy grande.

Sin embargo, uno puede tomárselo a modo de «ejercicio», jeje, para ver cómo es que uno puede hacer una crítica exhaustiva de una pseudociencia.

Comento que en realidad este texto lo mandé una vez a cierta página de escepticismo,

y por lo tanto tengo en cierto sentido derecho a copiarlo acá, ya que es mío.

Dice así:

La numerología pretende establecer el carácter o el destino de una persona en base a números obtenidos desde la fecha de su nacimiento y de las letras de su nombre, previamente codificadas como números.

Así, «saibaba» se codifica como 19, 1, 9, 2, 1, 2, 1. Se suma todo y se reduce a una cifra: 35, que reducido es 3 + 5 = 8.

Por lo tanto el número de mi nick, saibaba, es el 8, y eso significaría más o menos que soy un forista analítico, circunspecto, y me rige el planeta Saturno, lo cual indica que planifico cosas a largo plazo, y soy ahorrativo… (no les voy a decir si estos detalles sobre mí son ciertos o no, no vienen al caso).

Veamos qué pasa con esto.

Observación 1)

Dado el nombre de una persona en el alfabeto de un idioma, en base a ese alfabeto, debiera haber una sola interpretación numerológica posible, porque si no, se pierde precisión.

Pero el idioma castellano ha cambiado el orden de sus letras de acuerdo a las últimas convenciones.

A la hora de calcular el número de la personalidad, no queda claro ahora cuál alfabeto seguir y por qué.

Pero es claro que al sacar la CH y la LL, los cálculos dan resultados distintos, dando lugar a «cambios de personalidad» por culpa de un capricho de los académicos de la lengua española.

Observación 2)

Hay idiomas que no tienen alfabeto, como el chino.

No se puede allí calcular el número del nombre.

Ni hablar de los indígenas que no tienen escritura.

Observación 3)

A algún numerólogo avispado se le podría ocurrir decir que el nombre tiene una »vibración» deducida de la fonética, o sea, según cómo suena el nombre, y eso abarcaría a todas las culturas por igual, sin necesidad de alfabeto.

Sólo basta asignar un número a cada fonema.

Pero esto sería inconsecuente con el uso alfabético de los nombres, ya que volviendo a los idiomas con alfabeto, los mismos fonemas tienen distintas letras (C, K, Q) y las mismas letras tienen sonidos distintos (Ge/Gi contra Ga/Go/Gu), y hay letras sin sonido (H) que tienen número asociado.

Observación 4)

Los numerólogos usan la fecha de nacimiento para sus cálculos, pero esa fecha depende del calendario cristiano.

Al cambiar a un judío, debe usarse el calendario judío (supongo), etc.

Pero no hay solución con indígenas que no usan calendario.

Y si trato de aplicar numerología a un animal, no puedo elegir cualquier calendario para la fecha de nacimiento. Porque los animales no tienen cultura ni calendarios. El calendario es una convención cultural.

Observación 5)

Los numerológos convierten cualquier cosa a un dígito entre 1 y 9 mediante el método de reducción sumando cifras hasta que quede solamente una. Esto equivale aritméticamente a dividir por 9 y tomar el resto. ¿Por qué tanto hincapié en una aritmética módulo 9? ¿Por qué razón?

Aún aceptando el uso de las cifras del 0 al 9 como base para la numerología, ¿por qué razón se reduce todo a una sola cifra? ¿Quién inventó que eso es así y por qué?

En realidad no tiene ningún sentido, es sólo por mera ocurrencia.

Se pueden citar aquí razones históricas: los cabalistas hacen este tipo de operaciones, ya que convierten letras hebreas en números y llevan a cabo equivalencias de significado entre palabras de la Biblia. Una de esas operaciones es la reducción a una cifra, que se llama «Reducción Teosófica».

Se supone que las razones que justifican esto son, entonces, de carácter divino: Dios escribió la Biblia así para que los números hablen y develen misterios.

No obstante, muchos numerólogos ni siquiera conocen el origen de la reducción teosófica, amén de que aún sabiendo esto, no hay ninguna razón lógica de por qué se debe hacer tales cálculos y no otros.

Observación 6)

Los dígitos del 1 al 9 se usan, junto con el 0, porque la aritmética que usamos usa esos diez dígitos. Eso es solo parte del Sistema Posicional de Escritura de los Números en base a agrupar de Diez en Diez. O sea, Representación Decimal.

Pero también se puede agrupar de ocho en ocho, de seis en seis, de veinte en veinte, etc., porque un número es una cierta cantidad abstracta,

que no depende de cómo lo escribamos,

así que no es lo mismo que su representacion.

Un Numero es una entdad abstracta que puede representarse de infinitas maneras distintas acorde a todos los sistemas posicionales posibles. Cada sistema conduciría a resultados numerológicos diferentes aun cuando el »número» o »cantidad» de fondo no ha variado.

Observación 7)

Se puede argüir que la numerología debe usar la base Diez porque los humanos tenemos diez dedos, pero eso es porque usamos las dos manos para contar.

Si nuestros ancestros hubiesen agrupado de 5 en 5, usando una sola mano, la aritmética de la humanidad, y su numerología serían de base 5.

Los mayas usaban la base 20, y algunas civilizaciones antiguas usaban la base 60 (griegos y creo que también los babilonios). La humanidad de hoy se ha computarizado, y en las computadoras se usan las base Dos y Dieciséis.

Pero los numerólogos ni saben lo que es una base de numeración, ni entienden el concepto abstracto de número, pues ellos más o menos imaginan que «todos los números» no son otra cosa que «los dígitos del 0 al 9, más o menos combinados».

Observación 8 )

Suelen atribuir el origen de la numerología a Pitágoras o a Hermes,

pero esos personajes son muy antiguos,

y si de verdad crearon una numerología,

no es plausible que hayan usado el método actual de los numerólogos,

que se basa en reducciones a dígitos,

ya que en la antigüedad no existían los «dígitos».

Los dígitos son algo que parece haber nacido en India cerca del año 600 DESPUES de Cristo (mucho después de pitágoras y el legendario Hermes).

No hay registros històricos anteriores, ni mucho menos de si Pitágoras usó tal cosa.

Luego, ni siquiera las bases históricas de la numerología parecen ser consecuentes.

Más aún, ciertos métodos de los numerólogos modernos parecen tener origen en la Cábala hebrea,

pero es raro que los numerólogos hagan mención de las relaciones históricas con la Cábala.

Observación 9)

El significado atribuido a los dígitos es tan amplio y vago que seguro encontraremos coincidencias con nuestra personalidad o nuestra vida.

Para eso, hice un pequeño experimento, en el cual hago todo el procedimiento que se hace en numerología, tal cual,

pero cambio la tabla de significados de los números, por ejemplo, pongo el 1 en el 5, el 4 en el 2, etc., una permutacion.

El resultado será que muchas veces voy a seguir teniendo resultados coincidentes con mi carácter.

O sea que se trata de algo carente de significado final.

La interpretación final es demasiado amplia, ambigua o imprecisa.

Observación 10) (Esta no es mía)

La Numerología se escuda en los números, dándose aires de misterio y misticismo a través de ellos, aprovechando la lamentable ignorancia sobre matemáticas, incluso las más elementales, que existe en la mayor parte de la población.

Obviamente también aprovecha los huecos en formación racional y científica del público en general como arma de supervivencia.

Observación 11)

Establecer un debate con un numerólogo puede ser difícil, ya que cada uno de ellos tiene un método y un discurso que suele variar de uno a otro. Por lo tanto, para un «ataque» seguro, hay que conformarse con observaciones aplicables a todos los numerólgos, como las hechas en este post.

Hay numerólogos que hablan de vibraciones energéticas, otros de vibraciones angélicas, otros de energías numéricas, y por supuesto están quienes hacen relaciones de la numerología con el tarot, la astrología, y otras «disciplinas».

O sea que, en verdad, la Numerología sobrevive, pero es informe, no está establecida como ciencia ni nada similar, y simplemente «está ahí» para quien quiera aprovecharla y hacerse unos mangos por un tiempo.

En resumen, no he hallado justificacion para ninguno de los aspectos de la numerología, ni significado preciso en sus afirmaciones.

En cuanto a si es posible hacer predicciones acertadas,

es seguro que sí se puede, pero con la misma proporcion de predicciones erróneas.

Porque la verdad es que se predicen ambas cosas debido a la enorme imprecisión del discurso empleado.

Y ahí radica el engaño.

La gente crédula observa o busca sólo los aciertos, olvidando lo que no funciona, dando una falsa sensación de predicción.