Re: Matrimonio homosexual
Lo de carolina es casi demagogia: si a un grupo de veteranas le das como muestra homosexual una carroza gay… y sí, e dan ganas de llevarlos a la punta de una montaña y que hagan lo que quieran ahí.
«¡Alguien quiere, por favor, pensar en los niños?»
Nunca vi algo como ficcionar sexo oral, por ejemplo, pero si es así, es mucho si sucede en vía pública, sea gay o no (no digo que sea o tenga que ser ilegal, solo de mal gusto). Pero supongo que el limite de carolina son las comparsas donde semidesnudos bailan heteros y homos, sin sexo ‘ficcional’.
Ahora bien. Tengo la teoría de que esta sobreactuación y sobreexposición del gay de proa responde a una transición.
Represión—>Destape—>Acepación.
La primer imagen del gay que tenemos es el del tipo ‘loca’, sexualizado en su vocabulario y forma. Creo que esto se da porque son del tipo de homosexuales que no pueden disimular su condición por su marcada forma de hablar (tono) o forma de expresarse (ademanes, caminar)luego, para que no queden dudas, la vestimenta en algunos casos; mientras el homo o bi más masculino podía hacerse el ‘hombre’, gozando así de aceptación social haciéndose el hetero (an algunos casos a la noche se destapaba o lo hacen hoy). En el imaginario nos queda esa imagen de gay de comedia de siempre.
Hoy este movimiento tiene como mascaron de proa al gay provocativo (como todo lo que fue o es marginal) y exagerado, etc. Eso genera un cierto rechazo visual y moral si no se comprende de donde viene. ¿Gay revolucionario sería? jaj
Observemos bien, en nuestra sociedad hay mucho personaje sobreacuado de heterosexualidad.
Si damos vuela la cosa, me imagino una carroza de heterosexuales que salen a provocar, con parejas haciendo poses, bailando ‘perreo’ con el infraculural ‘reguetón’, mostrando carrozas con acoplamientos de falos y orificios, con su respectivos ovulo y espermatozoide, y el orgullo de parir niños congentios, etc. Por suerte no tenemos que hacer eso. Dantesco.
Supongo que todo ese estereotipo gay va a disminución pero hay que ayudar a que así sea. Lo que no ayuda es buscar como personajes en medios de comunicación al travesti-gay enfermo de la cabeza que genera un personaje ridículo de lo más vendedor. Eso no es buena prensa para los homo de esos que te ‘sorprende’ que lo sean (sorprenden porque tenemos el estereotipo incorporado para detectarlos). Cuando estos papeloneros desaparezcan, y el imaginario popular vea al gay como cualquier otro, se va a ir destapando más de uno que ni lo sospechamos. Incluso hoy pasa bastante esto.
*Rechazo visual, prejuicio y ficción.
Supongo que lo del rechazo visual se da porque uno no se ubica. Quiero decir que cuando una pareja de herosexuales se besa uno se refleja en el sexo que corresponda (sea una pareja de galanes o medio pelo); cuando dos gay hacen lo mismo, uno, en tanto hetero, se ‘proyecta’ con una persona del mismo sexo en frente y genera la reacción mental ‘sáquenme de aquí’. Esta reacción es fuere en ficción: en una película donde los protagonistas son gay y uno acosumbrado a ponerse el lado del personaje con nuestro sexo, genera un rechazo mayor al de dos parejas en la vida real. Genera más rechazo en la ficción que en la realidad, si no tenemos prejuicios, claro. Será porque en la ficción tomamos parte. Lo mismo, como hombre, cuando dos chicas son pareja, nos sentimos una tercera parte sin incomodidad alguna porque las protagonistas no pierden su femineidad. A las mujeres les gusta menos porque dos hombres pierde esa imagen de ‘macho’, icono que incluye solo un hombre sin importar la cantidad de mujeres en escena; así las mujeres le dan la mano a la idea de que el hombre gusta de estar en ocasiones con una o más de una mujer como un todo, mienras las mujeres pretenden estar más con un hombre, y si escoje varios hombres, sin tocarse, ¿he?. jajaj que temas clásicos y divertidos que se charlan, y sin importar si se llega a conclusión o no, se vuelven a debatir en otra mesa.