Re: How to die in Oregon
N3ri, toda decisión de este tipo viene acompañada con la pregunta de dónde ponemos el límite. Para poner un ejemplo trivial, registros de conducir. «Ahora hay registro para camiones, autos, ¿y ahora quieren poner uno para motos? ¿Y dónde ponemos el límite? ¿Por qué no ponemos registros para bicicletas, patinetas y triciclios?». Es un Falso Contínuo.
En realidad por ahora la discusión se centra en los casos más obvios. Casos como Terry Schiavo, o la otra mina italiana (que Berlusconi no quería desconectar porque «estaba en condiciones biológicas para tener hijos»). Si ni siquiera se reconoce esos casos tan extremos, ¿cómo carajo vamos a hablar de los más borderline?
Está bárbaro que haya gente discapacitada que tenga una vida plena y sea feliz, ellos nada tendrán que temer de la eutanasia, porque si ellos no lo quieren, nadie los va a obligar a morir. Pero que existan gente así no es razón para obligar a vivir a otras personas que no están en esa situación y que genuinamente quieren morir.
Y sobre el tema del cigarrillo, no me parece que sea irrelevante. No es una analogía directa, pero sirve para mostrar que ya aplicamos el principio de que cada uno puede matarse si quiere. (De todas formas, en el caso del cigarrillo, si fuera factible y útil prohibirlo, yo lo haría; no es verdad que no jodés a los demás. No sólo con el humo de segunda mano, sino con los costos a la sociedad de tener a miles de cancerosos y transplantes de pulmón.)
Permitimos que la gente se haga cosas nocivas hasta el punto de matarse, como el cigarrillo, ¿por qué entonces no permitimos que la gente directamente se mate para terminar con un sufrimiento insoportable?